Superliga: En el Puebla esperan una reacción con el año nuevo

La brasileña Lindsay, refuerzo invernal

Cinco puntos logrados de los últimos 18 puestos en juego han relegado al Club de Fútbol Femenino Puebla, un aspirante al título de Superliga, a un segundo plano. Tras un espectacular arranque de competición, en el que ganó los primeros ocho encuentros de liga, el club extremeño ha entrado en un gran bache de resultados producto en parte de las lesiones que han mermado a la plantilla, y también a que ha debido afrontar el último tramo de competición con varios de los equipos más poderosos de la categoría, que le han hecho pasar de comandar con holgura la clasificación a estar ahora quinto con 29 puntos, a cinco del líder Athletic.

Estudiantes, Rayo, Lagunak, Levante, Pozuelo, Sabadell, Barcelona, Nuestra Señora de Belén... Uno a uno iban cayendo todos los equipos que se enfrentaban al conjunto poblachino en el comienzo de competición liguera. La debacle comenzó en Lezama, donde las de Félix Pedro Rivera cayeron goleadas con claridad por el Athletic (4-1). Sin tiempo a digerir la derrota, el equipo poblachino se topó entonces con un Espanyol que empezaba a coger carrerilla y encarrilar una serie de victorias consecutivas que dura hasta hoy y se llevó los tres puntos del Municipal de Puebla de la Calzada.

Se recuperó el equipo de verde ganando en Oviedo (0-2) y sufriendo un tropiezo menor ante un Sevilla que también llegaba enrachado a Puebla (0-0); pero la adversidad volvió a tomarla con el equipo extremeño, que caía por la mínima en Torrejón -otro de los 'gallitos' de la categoría-, y sólo podía empatar in extremis en Huelva (3-3) ante un DTI Estudiantes que lucha por asentarse en una zona tranquila de la clasificación.

La competición de la Superliga sufre ahora un parón por motivo de las vacaciones navideñas y la disputa de la primera fase del Campeonato Estatal de selecciones autonómicas y en el seno del C.F.F. Puebla se confía en que este parón sirva para recuperar al equipo: "Creo que nos va a venir bien porque tenemos lesionadas importantes. A ver si empezamos a recuperarlas, y a ver si cambiamos también de actitud sobre todo", comentaba Félix Pedro Rivera descontento con el trabajo de sus pupilas en los últimos encuentros. En el club extremeño se tiene confianza en que aún es posible seguir peleando por el título de liga a pesar de que tener una plantilla no tan poderosa como la de otros competidores, pero advierte su entrenador que "si jugamos como en Huelva desde luego que no tendremos ninguna opción, está claro".

Tal vez para mejorar su situación, el cuerpo técnico ha decidido realizar una especie de minipretemporada en la última semana del año con sesiones de entrenamientos todos los días.

Refuerzo invernal

Finalmente la pasada semana el cuerpo técnico del Puebla decidía hacerle ficha a la brasileña Lindsay Carvalho, que había estado a prueba durante una semana en la localidad pacense. Lindsay, de 22 años, pasará a reforzar la banda izquierda del conjunto extremeño y, aunque llega falta de forma por haber estado casi un año sin competir, la jugadora espera poder estar a disposición de Félix Pedro Rivera para comienzos de año, una vez llegue el pase internacional. "Me he encontrado un equipo muy competitivo y muy bueno. Me encantan las hermanas -Lali y Conchi-; y también Alba, es muy buena jugadora. Y de Lourdes, ¡qué decir! La verdad es que todas son muy buenas y voy a tener que trabajar muy duro para poder jugar. Aún estoy falta de ritmo pero creo que con los entrenamientos que hacemos me pondré rápidamente en forma y espero poder debutar ya el mes que viene", comentaba la jugadora a futfem.com.

Esta brasileña con pasaporte portugués conocía algo de la liga española por comentarios de la guardameta internacional canarinha Andréia Suntaque, que jugó el año pasado precisamente en el Puebla y con la que coincidió en el São Paulo brasileño. "Es un fútbol mucho más rápido que el de mi país o el de Portugal", explicaba tras haber presenciado ya un par de encuentros de su equipo.

Pese al poco tiempo que lleva en Puebla, Lindsay ya está integrada plenamente en el equipo y sus propias compañeras y miembros del club se permiten la licencia bromear con ella y acusarla de ser la 'gafe' del equipo, algo que se toma con humor en su mezcla de portugués y español con el que habla.