Baile de entrenadores en las selecciones nacionales

Ocho técnicos han dejado a sus equipos por diferentes motivos en el último año

Baile de entrenadores en las selecciones nacionales

Desde que en septiembre del 2004 la afamada seleccionadora estadounidense April Heinrichs, de tan sólo 48 años, abandonara el cargo de seleccionadora nacional de EE.UU. ha pasado un año y siete entrenadores más le han seguido en su camino. April consiguió todo con la selección estadounidense y se retiró dejando en el cargo a Greg Ryan. Con su retirada junto con la de Mia Hamm y algunas jugadoras más, la actual campeona Olímpica ha cambiado de rumbo pero todos apuestan por el cambio sufrido.

Otra seleccionadora que llevó a su equipo a los máximos logros deportivos fue Silvia Neid que, con 41 años recién cumplidos, abandonó la selección alemana habiendo logrado el campeonato de Europa y el Mundial, quedándose a las puertas del trofeo olímpico. Su abandono del cargo este mes de junio fue una sorpresa para propios y extraños, pues se encontraba haciendo un trabajo envidiable por las germanas.

Su sustituta apenas necesita presentación. Campeona de Europa tres años consecutivos con la selección Sub-19 (2000, 2001 y 2002) y también del Mundo en Tailandia 2004, Tina Theune-Meyer cuenta con la confianza de federación, afición y jugadoras, pues la mayoría de ellas ya han pasado por sus manos anteriormente. La vacante en la selección Sub-19 ha sido ocupada por la centrocampista recién retirada Maren Meinert.

Otras tres selecciones, Dinamarca, Noruega e Italia también han movido ficha en el banquillo tras la finalización del Europeo disputado en Inglaterra. En Dinamarca Poul Højmose ha relevado a Peter Bonde, mientras que Italia y Noruega, por presión, y tras años y años de lucha sin recompensa en los torneos, han cesado a sus entrenadores para intentar cambiar el rumbo de sus combinados absolutos. Noruega se proclamó campeona olímpica en 1996 y desde entonces ha cosechado fiasco tras fiasco. Italia, por su parte, ha llegado a fases finales pero nunca ha hecho nada importante. El italiano Pietro Ghedin tomó el sitio de Carolina Morace y en el banquillo nórdico Bjarne Berntsen dejó la vacante a Age Oteen.

Thomas Dennerby, que llevó a Suecia a la final del Mundial 2003 y alcanzó las semifinales en los Juegos Olímpicos, descubrió uno de los duetos atacantes más temidos durante los años 2002 y 2003: Hanna Ljungberg y Victoria Svensson. Contrarrestando la mala suerte de las lesiones con buenos resultados, Thomas no fue discutido pero decidió retirarse de la selección, dejando el testigo a Marika Domanski-Lyfors antes del Europeo de Inglaterra.

En China, Pei Encai se marchó junto con la estrella Sun Wen, haciendo patente el cambio radical que la selección asiática quiere tomar de cara al futuro. Desde principios de la década pasada, en la que estuvieron presentes en varias finales mundiales, la escuela china ha ido decayendo hasta el punto del giro radical que está tomando diez años después. Encargado de ello estará Wang Haiming. Por último, en Escocia Anna Signeul será reemplazada por Vera Pauw.