Gijón paga la novatada y todavía no sabe lo que es ganar

Sólo venció al Sabadell, el partido que quedó invalidado

Gijón paga la novatada y todavía no sabe lo que es ganar

El Gijón Fútbol Femenino está pagando la novatada de su primer año en la élite, en la Superliga. Tras la disputa de 17 jornadas sólo ha sumado un punto, el cosechado ante el Lagunak el 29 de septiembre de 2005. Para colmo, tuvo la mala suerte de que quedaran invalidados otros tres que había logrado una semana después al ganar al Sabadell, en un partido en el que se impuso 3-4, por la posterior retirada del equipo catalán.

La situación de las gijonesas, a doce puntos de la salvación, hace que estén prácticamente abocadas al descenso de categoría, toda vez que quedan sólo nueve jornadas por disputarse con 27 puntos en juego, y que las esperan rivales de la parte alta de la tabla, como Athletic, Estudiantes, Levante o Rayo.

El domingo descansó el Gijón, que ya prepara su partido del próximo fin de semana en campo del Puebla, y su presidenta, María Amor Dongil, reconoce que "la temporada está siendo muy difícil tanto económica como deportivamente", y afirma con resignación que "cada equipo nuevo en la categoría necesitaría un año de adaptación, pero eso imposible en todos los deportes". Lo que tiene claro es que "el salto de categoría cuesta mucho".

Tranquilidad

Dongil sabía que sumar puntos "iba a ser complicado, viendo que hay algunos equipos que para nosotras son inaccesibles", aunque reconoce que no esperaba "estar en esta situación". Aún así, la presidenta cree "que no es para tanto", sobre todo observando el caso del Sabadell, que no pudo sobrevivir económicamente. "Nos ha costado mucho esfuerzo que el equipo pueda competir, pero ahora el problema es más deportivo que de dinero".

Uno de los principales desahogos económicos para el Gijón FF viene dado por el hecho de que "ninguna de las jugadores cobra", aclara María Amor, que está sorprendida de verlas "tan unidas pese a todo", y las ha tranquilizado diciéndolas que "si se desciende no pasa nada, aunque hay que luchar hasta el último partido y pelear por volver cuanto antes si bajamos".

En cuanto a la dimisión del entrenador, Ramón Trapero, que fue sustituido por Carlos Blanco tras la derrota ante el Sevilla el 18 de diciembre, la presidenta gijonesa cree que "quizás él esperaba otra cosa y al no acompañar los resultados pensó que no podía más".