La metamorfosis del DTI Huelva Estudiantes

En siete partidos ya suma más puntos que en toda la anterior campaña

La metamorfosis del DTI Huelva Estudiantes

Cuando ya ha transcurrido aproximadamente un cuarto de la competición, dos equipos encabezan la clasificación de la Superliga empatados a 21 puntos: el DTI Huelva Estudiantes y el Levante Unión Deportiva. Al segundo más o menos se le esperaba, pero el primero está siendo la revelación de la temporada y más cuando lo comparamos con sus números de la anterior campaña.

El equipo andaluz discurrió la mayor parte de la temporada 2004/05 coqueteando con la zona de descenso y no pudo respirar tranquilo hasta la penúltima jornada de liga, en la que un empate frente al Lagunak le dio la permanencia matemática en la categoría una temporada más. Durante el verano la secretaría técnica estudiantil, para no pasar los mismos apuros, decidió apuntalar el equipo en varios puestos con jóvenes talentos y una pizca de veteranía, y con diez nuevas caras y un equipo compensado en todas sus líneas se presentó en la parrilla de salida con el objetivo de superar los 20 puntos del anterior ejercicio. La empresa a priori parecía asequible dada la diferencia de calidad entre una plantilla y otra, pero ni los más optimistas del lugar esperaban que con tan sólo siete jornadas transcurridas se lograse superar dicha marca. Además de contar todos sus partidos por victorias, el equipo onubense también es el máximo realizador de la Superliga con 25 goles (empatado con el Sevilla) y el menos goleado en los terrenos de juego con sólo 4 goles encajados. Nada que ver con el pasado, pues basta decir que ya en la primera jornada de liga de la temporada 2004/05 el conjunto rojinegro llevaba cinco goles en contra y que la cifra de 25 tantos a favor no la alcanzó hasta la 17ª jornada de liga.

Puestos a buscar algunas claves de la transformación del DTI Huelva Estudiantes, su entrenador Cándido Rosado comenta que no hay más secreto que el trabajo diario con la plantilla y la buena actitud de ésta: "El nivel de compromiso y de implicación de las jugadoras, y su enorme espíritu de sacrificio y predisposición al trabajo en los entrenamientos son muy importantes ya que luego se trasladan al campo. Se dejan el alma en cada entrenamiento y en cada partido. Además, el nivel de competitividad es tal que las bajas que se producen se suplen sin que el equipo se vea afectado. Todas quieren hacerlo bien y no hay más que ver cómo van a morir en un sprint de diez metros o en la lucha por un balón en cada sesión preparatoria. Ahí está una de las claves del éxito de este DTI Huelva Estudiantes".

Terminar el campeonato entre los ocho primeros para poder disputar la Copa de la Reina es el principal objetivo que se marcan los rectores rojinegros, pero con la premisa marcada por su técnico de ir partido a partido y no pensando en nada más, y mucho menos en el campeonato de liga: "No es el momento de pensar en metas mayores. Si a falta de cuatro o cinco partidos nos encontráramos ahí en la cabeza con posibilidades, entonces sí. Pero todavía quedan muchas jornadas, nos tenemos que enfrentar a equipos potentísimos como el Sevilla, que será nuestro próximo rival, el Espanyol, el Levante, el Barcelona...y toda la segunda vuelta", apunta Rosado, que añade que "queda aún mucha liga, y el fútbol da muchas vueltas. Veintiún puntos nos permite ser optimistas pero para seguir trabajando, porque la Liga está muy igualada y un par de tropiezos te meten en la mitad de la tabla".

Contra el Sevilla, televisado por la RTVA

Tras dos semanas de parón motivado por los compromisos de la selección española, la Superliga regresa este fin de semana y el DTI Huelva Estudiantes viajará este sábado a tierras hispalenses para medirse al Sevilla Fútbol Club. Y como viene siendo habitual cada temporada, las cámaras de la RTVA no faltarán a la cita con el derbi andaluz, y darán el encuentro en directo a partir de las 12.15 horas. El conjunto sevillano marcha quinto en la tabla con 14 puntos y tratará de frenar la marcha de sus vecinas para, de camino, no perder comba con la cabeza de la clasificación.